Sin duda alguna cuando empezamos este rol como emprendedores hay muchas cosas que no podemos prever hasta que ya estamos en el camino. Pero también hay muchas cosas que Si Podemos Prever, ya que son cosas que todos tarde o temprano enfrentamos, como los Clientes Tóxicos, esos que nos hacen extrañar nuestros días de oficina con el jefe.
A veces toma tiempo darse cuenta que no todo lo que es trabajo es bueno, tener tu propio negocio no se limita a desempeñar un trabajo, sino a Trabajar Por Tu Negocio, hacerlo crecer, alcanzar nuevas metas y enfrentarse a nuevos retos. Si lo que queres hacer es simplemente desempeñar tu trabajo entonces siempre seguiras trabajando para alguien más y ese sueño que tenias de ser tu propio jefe quedara en el olvido.
Debes tomar decisiones y una de ellas es saber Con Quien No Queremos Trabajar:
El Cliente Enamoradizo
Es ese cliente que a primera vista se enamora de vos, de tu trabajo, de tu profesionalidad, de tu forma de comunicar las ideas. Y uno piensa que es el cliente perfecto: “Por fin, alguien que valora mi trabajo y no me pide rebajas” .
Pero… la ilusión dura poco. Al poco tiempo de trabajar con él te das cuenta que ha trabajado con varias personas antes y los despidió porque nadie es lo “suficientemente bueno” y resulta ser todo lo opuesto a lo que aparentaba.
Para evitar esto, pídele que te enseñe el trabajo que le han hecho y deja que se exprese y exponga sus puntos, es un buen método para descartar que en realidad es una persona que no sabe lo que quiere. Siempre es importante que lo que el cliente espera de vos quede por escrito.
El Cliente Alérgico al Compromiso
Es el típico que nos hace creer que todo le parece bien o no tenemos claro como esta la situación porque no se involucra mucho en el trabajo, es el que te deja hacer y hacer y hacer.
Haces tiempo para tener reuniones con el y enseñarle como va el proyecto y no te dice mucho, pero cuando se aproxima la fecha de entrega o el proyecto ya esta concluyendo te llama y te dice que ha estado revisando el proyecto detenidamente y que no esta seguro y quiere hacer unos cambios “pequeños” y terminas haciendo el proyecto por completo.
Para evitar esto, es mejor que antes estipules bien las cláusulas en el contrato: cuantas revisiones, cuantos cambios, fechas de entregas, etc. Y si estas pasando por esto ahora mismo, pues te aconsejo que trates de reducir al máximo los cambios, dejar muy en claro el rumbo que tomará el proyecto ahora y aclarar que se retrasará la fecha de entrega por sus cambios a ultimo minuto.
El Cliente Que No Te Da Buen Feeling
No sé ustedes pero a mi me resulta muy difícil trabajar con gente que no me agrada. Muchas veces ni siquiera sabemos porque alguien no nos agrada y otras veces lo tenemos bien claro ya sea que es un cliente que tiene mala fama o es alguien malcriado o otras cosas.
Mi primera recomendación es evitarlos a toda costa. No empiecen a trabajar con alguien que de ante mano saben no harán un buen equipo. Pero si ya estas en esta situación incomoda entonces márcale limites.
El Cliente Que Todo lo Sabe
Es el que ha leído un poco sobre diseño, marketing y cree que es un experto. Se queja por todo. Es el que tiene una opinión sobre todo y, por supuesto, su opinión está más fundamentada que la tuya.
Para lidiar con alguien así yo te aconsejo que seas muy sutil y le hagas saber de manera educada que vos también tenes el conocimiento necesario que por eso esta buscando de tus servicios. O puedes hacerte el ruso y hacer lo que creas conveniente.
El Cliente Que Lo Quiere Gratis O Casi Gratis
Ese que te regatea hasta el último céntimo. Aquel que te hace creer que trabajar con el gratis es beneficioso para vos porque vas a poder poner cosas en tu portafolio o también esta aquel que te pide pruebas gratis de tu trabajo para ver si tu trabajo lo convence y te contrata.
Para manejar esta situación si te pide una rebaja puedes hacerla en función de la situación sin dejar que se sobre pasen o que al final no termine siendo un proyecto rentable. Recuerda que cuando cobramos por debajo de lo justo empezamos a devaluar esta profesión y después es casi imposible cobrar mejor.
Y cuando te pidan hacer algo gratis es mi consejo rotundo es NO. Vos vales, tu trabajo vale, tu tiempo vale, tu conocimiento vale. Empezar no tiene nada de malo y por venir iniciando no debes sentir que tenes que regalar tu trabajo para llegar al éxito. Competir por precio es lo peor que podes hacer para posicionarte como profesional.
* En esto no me refiero a hacer colaboraciones o apoyar ciertas causas donde uno decide donar su tiempo.
En conclusión pensa bien si te funciona trabajar con alguien que: No es rentable económicamente, te produce mucho estrés y empieza a afectar tu vida personal o es una persona en la que ya no confías. Si te pasa esto es mejor desearle buena suerte y decirle adiós a ese cliente.
¿Y a ustedes les ha tocado lidiar con alguno de estos clientes? ¡Cuéntennos sus experiencias y dígannos como las han sobre llevado!
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